Google ha eliminado una aplicación de terapia de conversión gay de un grupo religioso llamado Living Hope Ministries de Play Store después de muchas protestas vocales de una amplia gama de grupos, incluidos miles de usuarios de Internet, el senador del estado de Nueva York, Brad Hoylman, y más recientemente, los Human Rights Campaign, según ha informado Axios.
Apple y Amazon ya borraron la app de sus tiendas hace tiempo
La eliminación de la aplicación se produce apenas un día después de que Google suspendiera la prueba del Índice de Igualdad Corporativa de Human Rights Campaign (que califica los lugares de trabajo en la igualdad general de LGBTQ) debido a la negativa de Google de eliminar la aplicación.
Google es la última empresa tecnológica importante en eliminar la aplicación: en diciembre, tanto Apple como Amazon eliminaron las aplicaciones de sus respectivas tiendas de aplicaciones, pero la app se mantuvo activa en la tienda de Google hasta esta semana. En ese momento, la llamada a Google para eliminar la aplicación se había hecho mucho más fuerte. Una petición de Change.org solicitó la eliminación de la aplicación y llegó a más de 142 000 firmas. En comparación, la petición para Apple contra la aplicación alcanzó solo 356 firmas antes de que Apple actuara para eliminarla.
Google se ha pronunciado al respecto
La terapia de conversión, que pseudocientíficamente afirma que la sexualidad de una persona puede cambiarse de homosexual a heterosexual, y que ha sido ampliamente desacreditada en numerosos estudios, está prohibida en muchos estados de Estados Unidos y otros países.
En una declaración entregada a Axios, Google se ha explicado: “Después de consultar con grupos de defensa externos, revisar nuestras políticas y asegurarnos de que tenemos un conocimiento profundo de la aplicación y su relación con la terapia de conversión, hemos decidido eliminarla de la Play Store, en consonancia con otras tiendas de aplicaciones “.
Sin duda, a pesar de haber tomado la decisión correcta, el hecho de haber tardado tanto tiempo en hacerlo no ha jugado en favor de Google, cuya imagen ha quedado ligeramente empañada tras este incidente.
